La arquitectura,
el hombre en el mundo
Tras séculos de evolución constructiva-destructiva, llegó el momento de mirar atrás. Necesitamos transformar el medio que nos rodea para vivir en el, artificializarlo, pero hai distintos modos de hacerlo. Proponemos una mirada diferente hacia el entorno, desde el respeto, conociendo las consecuencias de nuestras actuaciones.
En los años 70 se desruralizó el campo mutando nuestras ciudades en casi-ciudades deshumanizadas. En la pasada década la conversión de la vivienda en bien de inversión supuso el ataque definitivo a nuestro medio.
Tenemos capacidad para remediarlo: una arquitectura simbiótica e interdependiente, diseñada a la escala del lugar en el que nace; en la que la relación del interior se desvanezca.
El contacto
con el mundo exterior
Reformulemos la relación con el entorno gracias a la técnica. Nuevos materiales que permiten alterar los límites del interior y su relación con el exterior: mayor transparencia sin pérdidas térmicas, situarnos a nivel de el o por debajo sin humedad...
Mezclamos los conceptos arriba-abajo y dentro-fuera como evolución del saber acumulado: orientación y resguardo, la solana, el corral. Un proceso que añade a la topografía de nuestra tierra la transformación precisa para sacarle partido a sus ventajas: soleada, frescura, ventilación o privacidad.
El contacto
con el mundo exterior
Reformulemos la relación con el entorno gracias a la técnica. Nuevos materiales que permiten alterar los límites del interior y su relación con el exterior: mayor transparencia sin pérdidas térmicas, situarnos a nivel de el o por debajo sin humedad...
Mezclamos los conceptos arriba-abajo y dentro-fuera como evolución del saber acumulado: orientación y resguardo, la solana, el corral. Un proceso que añade a la topografía de nuestra tierra la transformación precisa para sacarle partido a sus ventajas: soleada, frescura, ventilación o privacidad.
Escala / impacto
ambiental
La imagen del territorio no es una cuestión de estilo: no es cubrir con teja o chapa, ni poner piedra o ladrillo en la fachada, o utilizar color gris o rojo o verde; no es rococó o rústico o high-tech.
Se trata de facilitar la inserción del edificio en el contorno artificial-natural, de alterar su impacto a nuestro antojo, ajustando su dimensionalidad aparente a través de mecanismos inter-dependientes directamente con el lugar.
Paisajismo
antibucólico
Toda intervención del hombre en el mundo supone una "artificialización" del medio. Incluso la primeira fruta recogida, la primera semilla de maíz plantada, el primer ganado arrimado; son transformaciones necesarias a nivel natural-biológico.
La imposibilidad del no intervencionismo nos lleva a la necesidad de la relación biótico-paisajística: topografiar la arquitectura mediante la inter-implicación olvidando el camuflaje y aceptando la inevitable huella dejada en el territorio como primer paso para la integración absoluta.
Paisajismo
antibucólico
Toda intervención del hombre en el mundo supone una "artificialización" del medio. Incluso la primeira fruta recogida, la primera semilla de maíz plantada, el primer ganado arrimado; son transformaciones necesarias a nivel natural-biológico.
La imposibilidad del no intervencionismo nos lleva a la necesidad de la relación biótico-paisajística: topografiar la arquitectura mediante la inter-implicación olvidando el camuflaje y aceptando la inevitable huella dejada en el territorio como primer paso para la integración absoluta.
Una nueva
materialidad
Una nueva conciencia, conocedores de los límites reales de los recursos naturales. Glocalización basada en el pensamiento global y acción local.
Reutiliza-biodegradabilidad material, economía de desplazamiento y de costes de transformación estableciendo un sumatorio de costes energético-ambientales: r.b+d+t, bajo la óptica de la racionalidad económica general.
Madera procedente de explotaciones controladas, con nuevos tratamientos para su uso interior y exterior; aportando ventajas térmicas, acústicas, estéticas y substitución de muchos de los materiales de construcción habituales por otros de menor repercusión ambiental.